Siguiendo con la oferta turística y gastronómica del Uruguay, me siento en la obligación de hacerles una advertencia. Guarda cuando piden una pizza por estos lares. Es primer lugar, las pizzas, en la mayoría de los lugares, son rectangulares, y obviamente también las porciones.
Si leen un carta cualquiera en un bar, restaurate o pizzería, van a notar que diferencian "PIZZA" de "MUZZARELLA". Sí, acá la pizza es un cosa y la muzzarella otra: la pizza es la masa de pizza sólo con salsa de tomate y la muzzarella es obviamente pizza de muzzarella. Luego a cualquiera de estas dos variedades le ponen lo que ellos llaman "gustos": morrones, jamón, atún, etc. Fijense en el folleto que adjunto y van a ver que no les miento. Si piden figazza también se van a sorprender, porque les van a traer una pizza con mucha salsa de tomate y muy poca cebolla, es decir, olviden lo que conocen por ese concepto (simple masa de pizza con mucha cebolla condimentada encima).
Por último atención con el tema del precio. Generalmente lo que ven en el folleto o la carta no es el precio de una pizza entera, sino de una porción rectangular, que equivale a más menos, dos porciones triangulares de las nuestras. Si querés más, ya tenés que hablar de comprar medio metro, o un metro. Tampoco es muy barato que digamos (para pasar los precios del folleto a pesos argentinos, corran la coma a izquierda un lugar). Además la pizza acá no es rica como en Argentina, donde hasta la pizzería más berreta del barrio te hace una pizza bien condimentada.
Yo más bien les diría que acá no coman pizza, y les sugiero en su defecto un buen chivito uruguayo (le llaman así a un sandwich, o también puede ser al plato, de churrasquito de lomo, con muzzarella, panceta, huevo frito, papas fritas y ensaladas varias).
No digan que no les avisé.